domingo, 20 de febrero de 2011

TELEBASURA

Para muchas personas, la gente famosa se convierte en amigos o enemigos según se informa sobre sus buenos o malos hábitos esto hace que en ciertas ocasiones la gente considerada “normal” les envíen correspondencia, les persigan y en muchos casos se enfaden si nos les contentan las cartas o no les firman un autógrafo, y en algunos casos, atentan contra la vida de celebridades, como en el caso de John Lennon.

Tanto la prensa sensacionalista, como las cadenas de televisión privadas compiten por las audiencias y si para ganar audiencia hay que difundir “basura” y si además de eso, los que dan esas noticias son personajes cuyo único merito ha sido ser concursante de un “reality-show” o hablar mal de sus exparejas, o crear un ambiente donde lo que prevalece es lo ordinario, donde los colaboradores se faltan al respeto para ganar audiencia. Con esto lo único que se consigue es que mucha gente crea que no es necesario ni estudiar ni esforzarse en hacer una carrera tan honorable como el periodismo ya que siendo “seudo periodista” ganara mucho más dinero y esto hace que no se de valor a lo que realmente lo tiene como es el esfuerzo, la responsabilidad, la dignidad…

Si preguntáramos a la gente si le gusta la prensa rosa o los programas de televisión llamados “telebasura”, seguramente la respuesta seria la misma: a mi no me gusta, pero me entretiene. Esta claro que si cada vez hay más revistas y programa de este tipo es porque es un negocio muy rentable, con el que se está forrando mucha gente, entre otros los mal llamador periodistas que son capaces de sin información contrastada, contar mentiras faltar al respeto, especular e incluso hablar de las cosas más intimas de los famosos dañando seriamente su reputación. En la mayoría de los casos se han metido en este mundo sin quererlo.

Hay actores, deportistas o políticos que por pertenecer a la vida pública, no tienen intimidad, ya que en todo momento (cuando salen de casa, hacen deporte, cuando llevan a sus hijos al colegio…) están perseguidos por los “paparazzis”, limitando el derecho que tiene cualquier persona a la intimidad tal como recoge el articulo 18 de la constitución en los puntos 1 y 2 (se garantiza el derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen. También dice que el domicilio es inviolable)

Lo que tiene que quedar claro es que al información que se da en los programas del corazón o prensa sensacionalista no esta corroborada simplemente son rumores, por lo que no puede considerarse parte del periodismo porque el fin del periodismo es informar y esta información debe ser novedosa, original, importante y sobretodo que se base en hechos reales. Creo que se podría terminar con este tipo de programas con un sencillo movimiento de mano, cambiando de canal o apagando la tele.